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Averías más frecuentes en los Tractores. Lista Completa

Los tractores son, ahora mismo, equipos totalmente esenciales en la agricultura y en otros sectores. Están diseñados específicamente para ser capaces de soportar condiciones muy exigentes, así como para realizar tareas pesadas. Y, pese a todo, el desgaste o la falta de mantenimiento puede acabar por provocar problemas y averías. Ante esto, lo mejor que se puede hacer es identificar cuáles son las averías más frecuentes y entender sus causas, para así poder mantener estos equipos en las mejores condiciones. Sigue leyendo, porque te vamos a hablar de cuáles son las averías más comunes y cómo se pueden prevenir. ¡No te lo querrás perder!

tractor trabajando en el campo

Averías relacionadas con el sistema de combustible

El sistema de combustible es una de las partes fundamentales de cualquier tractor. Cualquier problema que se pueda dar en este sistema puede acabar por provocar fallos graves en el rendimiento de este. Y, por desgracia, eso puede conllevar también una disminución de la eficiencia del combustible e incluso el fallo total del motor. Las principales averías relacionadas con este sistema son las siguientes:

Filtros de combustible obstruidos o dañados

Los filtros de combustible son cruciales, puesto que son los responsables de evitar que las partículas contaminantes lleguen al motor. Con el paso del tiempo, su calidad puede verse mermada, especialmente si no hay un buen mantenimiento. Pueden acabar por obstruirse, lo que hace que no fluya bien el combustible hacia el motor. Y un filtro que se obstruye puede conllevar una pérdida de potencia, e incluso hacer que el vehículo no arranque. En caso de que permitiera la entrada de contaminantes, podríamos ver también un desgaste prematuro de muchos componentes.

Lo mejor, para evitar este problema, es hacer un mantenimiento regular y unas revisiones constantes. Y, en caso de que se detecte una disminución en el rendimiento del motor, acudir a un especialista.

Fallos en la bomba de inyección

Por otra parte, nos encontramos la llamada bomba de inyección. Esta es la que se encarga de enviar el combustible desde el tanque en el que se encuentra hasta los inyectores. Y, en caso de fallar, lo que podríamos ver es un error a la hora de suministrar el combustible y, además, un problema en el funcionamiento del motor. Pérdida de potencia, dificultades a la hora de arrancar, un aumento del uso de combustible… Todo esto son indicativos de que podría haber un problema en este sentido.

Inyectores sucios

Por último, los inyectores también son importantes, puesto que se encargan de pulverizar el combustible en la proporción adecuada. Con el paso del tiempo, estos pueden acumular residuos y suciedad, afectando así a su capacidad. El resultado sería, entonces, un motor que experimenta una combustión incompleta, perdiéndose bastante potencia y haciendo que aumente el consumo de combustible. Es más, también podría aparecer un humo negro en el escape.

Averías en el sistema eléctrico

Pero el sistema de combustible no es el único que puede presentar fallos. Por ejemplo, el sistema eléctrico también puede verse dañado, y a continuación vamos a ver los errores más comunes.

Batería descargada o defectuosa

Una de las averías más comunes es que la batería se descargue por completo, o se encuentre defectuosa. La batería es la que suministra la energía que hace que el motor arranque; sin ella, esto es misión imposible. Una batería vieja, un uso excesivo de esta sin que se haya recargado o algún problema en el sistema de carga pueden suponer un inconveniente en este sentido. Para prevenir, lo mejor es revisar la batería periódicamente.

Problemas en el alternador

Pasamos ahora a hablar del alternador, que es el componente que se encarga de recargar la batería mientras el motor se encuentra en funcionamiento. En caso de que no funcione, la batería acabará por descargarse. Podríamos verlo reflejado en luces que parpadean o disminuyen de intensidad, luces de advertencia en el tablero o incluso una batería que no se recarga.

Cables y conexiones dañadas

Por último, también es interesante señalar que podemos encontrar averías en los cables eléctricos o en las conexiones. Estos pueden desgastarse con el paso del tiempo, soltarse, romperse… Una revisión tanto de los cables como de las conexiones es crucial si queremos evitar estos problemas.

Averías en el sistema de transmisión

Damos el salto ahora al sistema de transmisión, que es el responsable de transferir toda la potencia del motor a las ruedas del tractor. De esta manera, permite que el vehículo se vaya desplazando.

Problemas en la caja de cambios

La caja de cambios es el componente esencial en este sentido, puesto que permite controlar la velocidad y la fuerza del tractor. Los problemas en esta caja de cambios se pueden manifestar de diversas formas: dificultad para cambiar de marcha, ruidos extraños, deslizamiento de marchas… Y esto puede deberse a un desgaste de los engranajes o una lubricación insuficiente.

Desgaste del embrague

Junto a la caja de cambios, el embrague es otro de esos componentes importantes en el sistema de transmisión. Permite desconectar o conectar el motor de transmisión. Con el tiempo, los discos del embrague se pueden desgastar, algo que acaba por provocar problemas al intentar cambiar de marcha. Este es el síntoma más común, aunque también podemos hallar ruidos inusuales a la hora de cambiar de velocidad, o incluso una disminución de capacidad de arranque. Para evitar este desgaste excesivo, es importante no someterlo a esfuerzos innecesarios y usarlo de la forma correcta en el día a día.

Rotura de ejes o cardanes

Pasamos ahora a hablar de los ejes, que son clave a la hora de transmitir toda la potencia a las ruedas o a los implementos del tractor. En caso de que haya un desgaste excesivo y no se sustituyan, podríamos estar ante una rotura. No es lo habitual, pero se puede dar si hay un uso incorrecto o se aplica una carga excesiva en el tractor.

La clave es revisar de forma regular el estado de los cardanes, asegurándonos de que estén bien lubricados para que no haya un desgaste prematuro.

Otras averías comunes

Más allá de las averías que ya hemos mencionado, los tractores pueden sufrir otros problemas, como vehículos que son. Y el conocer las problemáticas a las que podríamos tener que enfrentarnos hará que seamos mucho más precavidos con las señales, y sepamos cómo reaccionar ante estas.

Sobrecalentamiento del motor

El sobrecalentamiento del motor es una de las averías más comunes. Puede tener causas bastante dispares: un radiador obstruido, una fuga en el sistema de enfriamiento, un termostato defectuoso… En caso de que el motor se caliente en exceso, se podría correr el riesgo de causar daños bastante graves a los componentes internos. Lo mejor, en este sentido, es asegurarnos de que el sistema de enfriamiento se encuentre en buen estado.

Fallos en el sistema hidráulico

En cuanto al sistema hidráulico, es fundamental para que funcionen bien los implementos del tractor. Y los fallos en este sistema se pueden deber a diversas causas: fugas de aceite hidráulico, bombas hidráulicas defectuosas, filtros obstruidos… Por desgracia, eso puede hacer que o bien el tractor pierda maniobrabilidad o bien los implementos no funcionen. De nuevo, la clave es realizar siempre un buen mantenimiento.

Cómo prevenir las averías más comunes en tractores

Aunque las averías en los tractores son inevitables con el tiempo, existen medidas preventivas que pueden minimizar su impacto. El mantenimiento básico del tractor es clave: desde revisar los niveles de aceite y líquido refrigerante hasta inspeccionar filtros y correas para detectar desgastes.

Otra práctica útil es capacitar a los operadores en el uso adecuado del equipo, evitando sobrecargas y técnicas de manejo que puedan dañar componentes como la transmisión o el sistema hidráulico. Invertir en repuestos de calidad y llevar un registro de las reparaciones también puede ayudar a evitar problemas mayores y asegurar que el tractor funcione de manera eficiente durante más tiempo.