Noticias

Tipos de Sembradoras

Las sembradoras son máquinas agrícolas que están diseñadas para ayudar en el proceso de siembra. Lo que hacen es distribuir las semillas de forma uniforme, algo clave cuando se trata de obtener el mayor rendimiento de los cultivos. Dependiendo tanto del tipo de sembradora como del sistema de siembra, lo cierto es que puede ayudar al agricultor a conseguir la máxima eficiencia en el trabajo del campo. Puede optimizar la distribución de las semillas y, además, garantizar las mejores condiciones de crecimiento. Hoy vamos a profundizar en este apasionante tema: cuáles son las distintas clases de sembradoras y para qué tipos de cultivo son más apropiadas cada una de ellas. ¡Sigue leyendo!

sembradoras trabajando el campo

Sembradoras a voleo

Comenzamos hablando de las conocidas como sembradoras a voleo, que son máquinas que se encargan de esparcir semillas de forma aleatoria. En este caso, no encontramos un patrón preciso, sino que todo depende un poco del azar. Es una de las sembradoras más antiguas y sencillas, y se usa en cultivos donde no es necesario colocar las semillas en hileras definidas. Depende, pues, del tipo de laboreo que se quiera realizar. Además, se puede llevar a cabo de manera manual o con la ayuda de máquinas, dependiendo tanto de la extensión del terreno como del tipo de cultivo.

Tiene como principal ventaja que permite cubrir grandes áreas en poco tiempo. Pero, claro, tiene también algunas debilidades: falta de control sobre la profundidad de las semillas, así como sobre su distribución. Esto puede conllevar que las plantas emerjan de forma bastante desigual, e incluso se desperdicien semillas.

Dentro de este grupo, podemos identificar dos tipos: centrífugas y de descarga libre.

Centrífugas

Las sembradoras centrífugas funcionan mediante un sistema de discos concreto que va girando a alta velocidad. Es este el que se encarga de ir esparciendo las semillas sobre el terreno. Son extremadamente eficientes a la hora de cubrir grandes áreas: pastizales, praderas… Además, su diseño trae consigo una tolva donde se pueden ir almacenando las semillas que luego son liberadas hacia los discos.

Son perfectas para cultivos que no requieren una colocación precisa de semillas. Es más, también se usan para distribuir fertilizantes granulados, porque la técnica es efectiva también en este sentido.

De descarga libre

Estas sembradoras son incluso más simples que las anteriores. Funcionan ayudándose de la gravedad. Es decir, que las semillas se van liberando directamente desde el recipiente en el que se encuentran, sin que exista un mecanismo de dispersión activo. El proceso es rápido, pero menos preciso que en el caso anterior.

Sembradoras en línea

A diferencia de las sembradoras a voleo, las que funcionan en línea sí que distribuyen las semillas en hileras bien definidas. De esta manera, son perfectas para momentos en los que el laboreo debe ser muy conciso. Esta siembra en línea favorece que el crecimiento de las plantas sea mucho más uniforme, así como un mejor aprovechamiento del espacio. Además, facilita a posteriori el trabajo de mantenimiento del cultivo, como la cosecha.

Estas sembradoras están equipadas o bien con discos o bien con cuchillas. Estos van abriendo pequeños surcos en el suelo, donde posteriormente depositan las semillas, siempre a la misma profundidad. Y, por último, las hileras de tierra cubren todas las semillas para conseguir protegerlas y así favorecer que germinen.

Son muy útiles en cultivos como el de cereales, leguminosas y algunas hortalizas. Una siembra en hileras equidistantes es crucial en estos casos, y así se consigue el mejor rendimiento.

Sembradoras a golpes y monograno (de precisión)

Con las sembradoras a golpes se consigue que las semillas se depositen con la mayor precisión. Y esto sucede tanto en la distancia que hay entre cada una de ellas como en la profundidad a la que son colocadas. Normalmente, se usan para cultivos que tienen un gran valor, o en aquellos en los que es esencial que las plantas estén bien espaciadas. Son más caras que las sembradoras anteriores, pero también muy eficientes. Dentro de estas sembradoras a golpes podemos distinguir las que son tal cual, a golpes, y otras que son más precisas y se conocen como monograno.

A golpes

En primer lugar, las conocidas como sembradoras a golpes funcionan mediante un sistema mecánico que se encarga de golpear el suelo en puntos concretos. Así consigue abrir pequeños agujeros donde va depositando la semilla. Es un mecanismo muy útil cuando las semillas son grandes, o cuando los cultivos requieren sí o sí una separación concreta. Con cada golpe, se crea un agujero que se cierra automáticamente tras haber insertado la semilla. Se usan mucho con girasoles, maíz u otras plantas por el estilo.

Monograno

En el caso de las sembradoras de monograno, hablamos del ejemplo más avanzado de sembradoras de precisión. Usan un sistema que selecciona una semilla y la deposita cada vez; son altamente eficientes, y consideradas de una gama bastante alta. Es más, hay algunos modelos que están equipados incluso con un control electrónico que permite ajustar incluso la velocidad de la siembra, la separación y la profundidad.

Sembradoras para siembra directa

Por último, nos encontramos con las llamadas sembradoras para siembra directa. Estas son una innovación relativamente reciente, y están diseñadas para trabajar en sistemas de siembra donde no habrá laboreo, o este será mínimo. Es una práctica que lo que busca es conservar al máximo el suelo, evitando la erosión y ayudando a que su estructura incluso mejore a largo plazo.

Son capaces de cortar la capa de residuos vegetales que queda en el campo tras la cosecha anterior. De este modo, van abriendo surcos donde depositan semillas. Tras eso, se cierra el suelo encima de las semillas, sin necesidad de arar o de remover grandes superficies de tierra. Es especialmente beneficioso para la agricultura sostenible, puesto que reduce el consumo de combustible y ayuda a preservar la humedad del suelo.

A esto hay que añadirle que son muy versátiles, y que pueden ser usadas en una gran variedad de cultivos diferentes. E incluso hay maquinaria que también está equipada con sistemas de fertilización, aplicándolos a la par que se siembra. Y, de este modo, mejorando al máximo la eficiencia del proceso.

💡 Tipos de arados